Redacción
11/04/2011
La de este domingo 10 de abril era la
primera actuación en Vietnam del que fuera el icono musical del fervor antibelicista en los años sesenta y setenta en Estados Unidos y Europa.
Dylan ha tardado treinta y cinco años en tocar en directo en el país que hasta 1975 encarnó el gran drama de toda una generación de jóvenes norteamericanos que se vieron forzados a luchar contra el enemigo comunista en el escenario bélico por antonomasia de la Guerra Fría.
Hoy, casi la mitad de los 87 millones de habitantes de Vietnam, tiene menos de 30 años, es decir, no tiene un conocimiento directo de la guerra y mucho menos de la música de Dylan.
La audiencia, unas 8.000 personas, estaba compuesta mayoritariamente por vietnamitas de mediana edad así como muchos occidentales, entre ellos veteranos de la guerra que posteriormente han regresado a Vietnam, primero en tareas solidarias o también, con la apertura económica, a emprender negocios.
Como la censura todavía impera sobre los actos culturales en Vietnam, Dylan tuvo que someter a las autoridades su lista de canciones, entre ellas las más conocidas, como Blowin’ in the wind o The times they are a changing. Todo parece indicar que no hubo ningún recorte en el programa ofrecido por Dylan.
No fue así en la etapa previa de la gira asiática que está llevando a cabo el músico norteamericano.
En
China, donde también Dylan tocaba por primera vez, vio censuradas algunas canciones en las dos actuaciones que llevó a cabo, en Pekín y Shanghai.
Ello le ha valido las críticas de Human Rights Watch básicamente por la incongruencia que supone ser el símbolo del sueño de la libertad y aceptar la censura de un gobierno que la niega a sus ciudadanos.