Los talibanes abren una oficina política en Catar para negociar el fin de la guerra civil en Afganistán

Redacción 04/01/2012 Los talibanes han anunciado su intención de abrir una oficina política en Catar para negociar con la coalición internacional liderada por Estados Unidos el futuro de Afganistán.

El anuncio realizado por los talibanes afganos se interpreta como un gesto para mostrar su voluntad y compromiso de negociar directamente con la comunidad internacional el fin de la guerra de Afganistán.

En un comunicado, el portavoz de los insurgentes, Zabiullah Mujahid, ha pedido un gesto a Estados Unidos y que libere a algunos de los presos talibanes detenidos en Guantánamo.

La decisión de abrir una delegación de representación política en Catar se ha interpretado como un importante paso adelante ya que permitirá mantener negociaciones directas para poner fin a la guerra civil en Afganistán y facilitar una transición.

Hasta ahora los talibanes exigían la retirada de las fuerzas extranjeras como primer paso previo a las negociaciones.
El presidente afgano, Hamid Karzai, valora la decisión como un gesto de buena fe que permitirá tener interlocutores directos y generará confianza.

De momento, las conversaciones que se han llevado a cabo de forma secreta con los talibanes, y que tiene el apoyo de la comunidad internacional, han estado lastradas por la desconfianza e incluso graves errores.

El más grave se produjo en septiembre con el asesinato del jefe del consejo de la paz y expresidente de Afganistán, Burhanuddin Rabbani, que llevaba el peso de las negociaciones de paz con los insurgentes.

La elección de Catar aleja, en teoría, las negociaciones de la influencia de Pakistán, país al que la comunidad internacional y el gobierno de Karzai acusan de dar cobertura a la insurgencia talibana. Pero también aleja la negociación de Kabul y de las autoridades afganas ya que coloca la negociación entre la comunidad internacional y los talibanes.

La apertura de una oficina de representación política lejos del conflicto armado en Afganistán también muestra los problemas internos de los talibanes que empiezan a mostrar divisiones y enfrentamientos.