Redacción
26/04/2011
La investigación llevada a cabo por el gobierno de Bangladesh sobre supuestas irregularidades financieras en el Grameen Bank del Nobel Muhammad Yunus ha concluido que no hay indicios de fraude.
El gobierno de Bangladesh ordenó la creación de una comisión especial para investigar la denuncia lanzada a finales del año pasado por un documental de una televisión noruega.
Este documental acusaba al Grameen Bank de haber desviado, a mediados de los 90, unos 100 millones de dólares de fondos procedentes de Noruega para fines humanitarios a una entidad del grupo no dedicada a la concesión de microcréditos.
A pesar de que el propio gobierno noruego desmintió que se hubieran malversado sus aportaciones, el gobierno de la primera ministra Sheikh Hasina, que ha declarado públicamente su animadversión hacia Yunus, decidió investigar el caso.
Ahora el ministro de Finanzas, AMA Muhith, ha presentado las
conclusiones de la comisión, que dejan claro que estos fondos no se usaron para ningún propósito deshonesto ni ilegal.
Sin embargo, la exoneración del Grameen Bank de este caso no impedirá que siga adelante la destitución de su fundador, Mohammad Yunus, como director ejecutivo del mismo.
El Banco Central de Bangladesh, la entidad que regula el sistema financiero del país y que posee una cuarta parte del Grameen Bank, destituyó el pasado mes de marzo a Yunus, de 71 años, por haber superado la edad de jubilación establecida para directores de bancos, que es de 60. Sin embargo, esta norma no se había aplicado en el país en años y ha sido criticada por responder a motivaciones políticas.
En 2007, Yunus barajó la posibilidad de entrar en política y crear un partido para concurrir a las elecciones de 2008, lo que no gustó en absoluto a los miembros de las tradicionales dinastías políticas del país, entre los cuales se encuentra la primera ministra Sheikh Hasina.