Redacción
26/08/2011
El
parlamento indio se reunirá en una sesión especial el sábado para debatir las principales reformas a la ley anticorrupción, conocida como Lokpal, que proponen los seguidores de Hazare, pero no se votará ninguna resolución.
El equipo del activista tiene tres principales reclamaciones: que la ley incluya reducir la burocracia, extender la institución del Defensor del Pueblo a la administración de los estados federales y crear una carta de derechos del ciudadano.
Días después que el primer ministro Manmohan Singh pidiera personalmente a Anna Hazare que abandone la huelga de hambre, ha sido Rahul Gandhi, el heredero político de la familia que controla el Partido del Congreso desde su creación (nieto de Indira Gandhi y bisnieto de Nehru), el que ha entrado en el debate.
Rahul Gandhi ha reconocido el papel de Anna Hazare para dar voz y aglutinar el descontento de la sociedad civil por la corrupción, pero ha condenado su huelga de hambre que considera un atentado a la democracia por ser una táctica para interferir en el funcionamiento del gobierno, elegido democráticamente, y de la acción parlamentaria.
En sus declaraciones asegura que la corrupción, que ha afectado directamente a miembros de su partido, no tiene soluciones fáciles y se puede crear la ilusión que una ley puede acabar con ella.
El que posiblemente será el próximo candidato a primer ministro ha asegurado que se necesita la complicidad de todo el mundo para acabar con la corrupción. Además de la ley que crea la institución del Defensor del Pueblo, propone una serie de medidas políticas que incluyen la financiación de los partidos y las elecciones, aumentar la transparencia de los contratos públicos, una mayor regulación de sectores como la minería o el suelo y una reforma fiscal.